Sobre el autocuidado

Pronto cumplo años. Me he hecho un auto-regalo porque sigo siendo la presidenta de mi club de fans. Que yo sepa no ha habido elecciones para cambiar y el cargo, de momento, lo renuevo anualmente y cumplo a rajatabla con preceptos como llevarme bien conmigo misma, exigirme, pero hasta dónde es sano y con amabilidad. Mi regalo ha llegado hoy, y traía algún añadido.




Por supuesto, ha sido compra local, pero en este caso de mi barrio de Logroño, donde viví de forma intermitente mientras existió nuestro hostel. 

Las pequeñas tiendas en manos de valientes emprendedoras y emprendedores se han puesto las pilas. Para muchos el parón del COVID supuso un susto, claro, pero también un momento decisivo para transformarse o no. Ella decidió lo primero. 

Ella es Naiara, que se ha convertido en amiga. Primero la conocí a ella y luego su proyecto que, como os digo, se ha transformado. El resultado es fruto de la propia evolución de esta mujer inquieta, quien ha decidido construir en femenino y con la sororidad por bandera. 

Su delicada tienda ahora se llama Piel de Artemisa y, como digo, trasciende el ámbito local, es decir, Logroño y La Rioja, y llega a otros rincones a través de la venta online. 





Está creando una nueva web, pero su cuenta de Instagram es, de momento, su escaparate para quienes no residimos en la capital riojana. No es lo mismo que verle a ella y charlar con ella, pero se parece bastante porque Naiara atiende con amor y profesionalidad también a través de esta ventana. Se esfuerza en conseguir un trato cercano, cálido pese a ser a través de un dispositivo, y os aseguro que lo consigue. 

Somos amigas y nos comunicamos con mucha frecuencia. Nuestra amistad se ha construido a base de cariño, algún que otro vino y lecturas compartidas. Nos acercan inquietudes y planteamientos vitales similares. 

Así, hace unos días, compartí con ella mi interés por iniciarme en los aceites esenciales. Me llaman la atención desde hace tiempo y fue, precisamente, gracias al consejo de Naiara, como he dado el primer paso.

Ella ha seleccionado para mí cinco y me sugirió que me comprara un sexto, dado que ella no lo tenía en stock en ese momento. Me explicó a través de audios cuáles eran, en su opinión, los ideales para el momento que física y emocionalmente vivo actualmente. Me sorprendió todo lo que sabe de cada uno. Me sorprendió por la cantidad de documentación, no porque dudara de ella, por supuesto que no. 





Os diré que la semana pasada empecé a utilizar el que me sugirió, el de salvia, y estoy realmente sorprendida. 

Naiara, que es amor, y siempre tiene presentes los momentos bonitos de la vida (aunque ella y yo nos conociéramos en uno feo para mí), añadió al paquete sus particulares detalles para mi cumple. 





Os sugiero seguir sus pasos, prestar atención a sus sugerencias. Su propósito, ya sea a través de productos, consejos sobre hábitos o lecturas, suele estar enfocado a nuestro bienestar. Especialmente al de las mujeres, a quienes ella invita a formar parte de su comunidad o tribu. 

Compra local. Contribuye a la supervivencia y vida del pequeño comercio. Sea presencial o de forma virtual. Nos necesitan y nosotros, los consumidores, necesitamos voces con experiencia, tanto para comprar un kilo de naranjas como un exfoliante de piel. 

Ésa, al menos, es mi prioridad.

Ah, y Naiara prepara unos paquetes bonitos, bonitos. Casi da pena abrirlos, pero claro... dentro espera lo mejor. 

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